¿Cómo solicitar asilo en Nueva Zelanda?
El gobierno de Nueva Zelanda cada vez más apoya la libertad de expresión, el credo y los distintos pensamientos políticos y, por tanto, evalúa constantemente en cómo ayudar a los foráneos que huyen de sus países por acciones de discriminación. Es por ello, que en el territorio neozelandés habitan más de 1 millón de extranjeros, siendo el mayor porcentaje individuos en condición de refugio.
En la actualidad, recibe alrededor de las 400 peticiones de protección internacional al año, con un 30% aproximado de aceptación. De hecho, para el 2021 fueron aprobados 297 casos, siendo beneficiados principalmente ciudadanos de India, China, Afganistán, Indonesia, Malasia y Turquía.
Cabe destacar, que la eficiencia del sistema de protección de Nueva Zelanda aumentó de forma sorprendente, tras la creación de la Ley de Inmigración de Determinaciones del Estatus y Protección del Refugiado, en el año 2009. La misma se basa en la Convención sobre Estatuto de Refugiados de 1951 y 1967, para brindar ayuda a quienes en realidad son víctimas de abuso, discriminación y/o persecución.
Primeras consideraciones para solicitar asilo en Nueva Zelanda
En primera instancia, ten en cuenta que el sistema otorga asilo solo a quienes cumplen con el concepto de refugiado, el cual indica que es aquella persona que por razones debidamente fundadas teme regresar a su país de origen. Lo que corresponde a hechos de persecución, discriminación, violencia, torturas, tratos inhumanos, entre otros.
Lo antes expuesto, corresponde a lo establecido en la Convención contra la Tortura de 1984 y el Pacto de Derechos Civiles y Políticos de 1966. Se trata de una ampliación a los motivos por las que los individuos pueden huir de su país, puesto que el objetivo de Nueva Zelanda es contribuir con la paz del mundo.
En segundo lugar, es importante saber que para iniciar un trámite de asilo en el territorio neozelandés es necesario estar en el país o uno de sus puntos de entrada, como aeropuerto o puertos marítimos. Y los trámites serán gestionados por oficiales de la Unidad de Protección al Refugiado, la cual trabaja de manera conjunta con el Ministerio de Relaciones Exteriores y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
Procedimiento para realizar la solicitud de asilo
Una vez que te encuentres dentro de Nueva Zelanda o uno de sus puntos fronterizos autorizados, entonces puedes empezar con el procedimiento de petición. Los pasos son:
Paso #1. Anunciar la solicitud
El primer paso es ir a las oficinas de policías autorizadas o migraciones para manifestar el deseo de requerir protección internacional por parte del gobierno neozelandés. En dicho instante, un funcionario le hará entrega de un formulario oficial de solicitud de asilo, el cual deberás llenar con tus datos. Así mismo, un miembro de Protección y Refugio te preguntará sobre los motivos del abandono del país natal y solicitará documentos de identidad y evidencias del caso.
Ahora bien, si por alguna circunstancia no posees documentos de identificación, los oficiales están en el deber de llamar a la policía y detenerte hasta que validen quién eres. Para ello, enviarán tus huellas dactilares al Ministerio de Relaciones Exteriores de Nueva Zelanda.
Si te ubicas dentro del territorio, la dirección de la Oficina de Inmigración (INZ) a la que debes acudir es: Level 12, 280 Queen Street, Auckland CBD. El horario de atención es de 8:30 am a 4:00pm; y no hay que hacer previa cita. Para más información también puedes realizar una llamada telefónica al 09 928 2236.
Paso #2. Análisis inicial de la solicitud
Después de entregar el formulario y los documentos antes mencionados, los oficiales de Protección y Refugio evaluarán de manera rápida si la solicitud ha de considerarse o no. En caso negativo, te indicarán abandonar el país.
Por su parte, si el análisis es positivo en esta instancia, entonces se procederá a estudiar los antecedentes penales del individuo y la conexión con personas dentro del país, si existen. Los delitos a investigar son aquellos relacionados con guerras, crímenes inhumanos y cualquier hecho que viole los principios de las Naciones Unidas.
Paso #3. Declaración escrita
Por consiguiente, el oficial solicitará hacer una declaración escrita de los hechos para completar la solicitud de asilo. En la misma se detallan los hechos, las personas con quien vivirá durante el trámite y los datos de contacto. Estos últimos deben ser actualizados al existir un cambio, ya que al domicilio se enviarán las notificaciones siguientes, como la fecha de la entrevista.
Paso #4. Entrevista
Aquí nuevamente te reunirás con un oficial de Protección y Refugio para exponerle los hechos que te llevaron a abandonar el país de origen o residencia habitual. Es el momento también de entregar evidencias que por razones externas no pudiste suministrar el día del anuncio de la solicitud.
Relatar los hechos de modo cronológico resulta lo más recomendable en la entrevista. Justo así evitas cometer errores y ayudas al oficial a entender con mayor facilidad los fundamentos del caso. Después de ello, recibirás un informe que resume lo narrado en dicha reunión.
Cabe acotar, que este día puedes presentarte con un abogado asesor en ejercicio, es decir, con licencia vigente ante las leyes de Nueva Zelanda. Este servicio, la mayoría de las veces, es pagado por los solicitantes; sin embargo, el Ministerio de Justicia promueve ayuda gratuita, para más información consulta aquí.
Paso #5. Presentaciones finales y veredicto
En algunas ocasiones, después de la entrevista, los oficiales pueden solicitar otras presentaciones para validar aspectos del informe o evidencias suministradas. De ser así, igualmente trata de ser lo más específico posible.
Después de ello, en un plazo máximo de 140 días desde que inicia la solicitud, recibirás el veredicto final, el cual puede ser positivo o negativo. El primero, indica que has sido aceptado como refugiado y, por tanto, puedes permanecer en el país. El segundo, que no cumpliste con lo establecido en la Ley de Inmigración de Determinaciones del Estatus y Protección del Refugiado y debes salir de Nueva Zelanda.
A pesar de obtener una respuesta negativa puedes recurrir al proceso de apelación ante los tribunales, y si el veredicto no cambia puedes iniciar un nuevo trámite. Ahora bien, en este caso las razones deben ser presentadas de forma distinta para evitar que sea considerada “claramente abusada”.
Después del veredicto positivo
Si bien, lograr un veredicto positivo es el deseo de todos los solicitantes de asilo, es fundamental tener en cuenta que el análisis continúa después de ello. La razón, es evaluar si las condiciones de los refugiados a cambiado y pueden ser devueltos a su país o si el sistema fue violentado con algún fraude.
En otras palabras, si las razones por las que huiste de tu país ya no existen entonces el gobierno de Nueva Zelanda está en el derecho de revocar el estatus de refugiado. Es así como el sistema trabaja con mayor eficiencia, puesto que garantiza que la ayuda humanitaria sea otorgada a quienes la necesitan.
En lo que respecta a la detección de fraudes, ocurre una anulación automática de la condición de refugiado. Si bien es un delito la falsificación u ocultación de evidencias, las políticas de Nueva Zelanda solo expulsan al país de origen a la persona, sin presentar cargos penales.
¿Es recomendable pedir asilo en Nueva Zelanda?
Nueva Zelanda es un país asombroso, con bellezas naturales y múltiples oportunidades de empleo y educación. Sin duda, es una excelente opción para solicitar asilo político por parte de quienes son víctimas de violencia, persecución y discriminación en su país de origen.
Además, por si fuera poco, Nueva Zelanda atiende casos de emergencia, como los de los ciudadanos que vienen de guerras y posee una estrategia de asentamiento de refugiados única en el mundo. En tal sentido, no expulsa a las personas mientras se define el veredicto y promueve en todo momento la inclusión social, el empleo, la salud y vivienda.
